Tras meses de espera, los primeros días con tu nuevo bebé son un momento emocionante y emotivo, lleno de alegría al ver a tu pequeño por primera vez. Con tantas cosas como están pasando, es normal que te sientas también cansada a veces, sobre todo cuando te estés recuperando del parto.
Qué sucede después del parto?
Si tu bebé nace en un hospital, es posible que te manden directamente a tu casa desde la sala de partos o puede que te trasladen a una planta de maternidad si necesitas algún tipo de cuidados especiales. Si tu parto no presenta complicaciones, es probable que tu estancia en el hospital sea corta. Sería bueno que comentaras con tu matrona antes del parto la asistencia posnatal que recibirás, para que sepas lo que puedes esperar.
¿Cuándo puedo empezar a dar el pecho a mi bebé?
El contacto piel con piel inmediatamente después del parto puede ser una experiencia maravillosa para establecer un vínculo con tu bebé; es también una estupenda oportunidad para tratar de darle el pecho por primera vez. Si necesitas ayuda para colocar a tu bebé y lograr que se te agarre, tu matrona estará allí para ayudarte.
¿Qué debo comer?
Ahora que eres una nueva mamá, alimentarte bien debe ser una prioridad para ti, especialmente si estás dando el pecho a tu bebé. No tienes que hacer ningún cambio especial en tu dieta, sólo esforzarte por seguir una dieta saludable y equilibrada. A veces la maternidad reciente puede parecer una vorágine, así que intenta preparar algunas cosas antes del parto como, por ejemplo, cocina y congela comidas o llena la despensa con frutas y verduras envasadas para que tengas siempre a mano algún alimento saludable.
¿Qué ocurrirá con el peso que he ganado durante el embarazo?
Recuerda que has tardado 9 meses en ganar ese peso, así que debes tener paciencia contigo misma. Si comes razonablemente bien y haces ejercicio, no deberías tardar más de un par de meses en volver a tu peso anterior al embarazo, si lo iniciaste con un peso normal. Bebe mucha agua y trata de comer alimentos ricos en los nutrientes que necesitas y pobres en calorías y grasas. Los alimentos ricos en proteínas, como la carne magra, las aves y las legumbres, tienen un bajo contenido en grasas y un alto contenido en fibra; además, te producen sensación de saciedad durante más tiempo. Si tienes hambre entre comidas, recurre a tentempiés saludables, como fruta o palitos de zanahoria.
En cuanto al ejercicio, ¿cuándo puedo empezar a practicarlo?
Es mejor que lo hables con tu médico, ya que depende del tipo de parto que hayas tenido y de cómo te estés recuperando después del nacimiento de tu bebé. Es posible que tenga que pasar algún tiempo hasta que tus articulaciones vuelvan a su estado normal, por lo que es recomendable que esperes hasta la revisión posnatal que te harás a las 6 semanas antes de empezar a hacer algo más que un ejercicio suave. Si el parto ha sido por cesárea, puede que tu cuerpo tarde un poco más de tiempo en recuperarse. Tu matrona podrá darte más consejos sobre los ejercicios posnatales que te convendrá hacer.
Cuando ya puedas reanudar tu actividad normal, el ejercicio regular te ayudará a relajarte, a mantenerte en forma y a sentirte con más energía. Además, puede ayudar a que tu cuerpo se recupere después del parto y también a prevenir la depresión posnatal.
¿Por qué estoy tan emotiva?
El parto es una experiencia totalmente única, pero a veces puede ser algo parecido a subirse en una montaña rusa. En los primeros días sufrirás un cambio hormonal brusco, por lo que es normal que te sientas un poco triste en los días siguientes al parto. Si tienes un parto difícil o estás muy cansada, la depresión posparto podría afectarte un poco más.
Pero tanto si estás dando saltos de alegría, como llorando de cansancio o ambas cosas, es importante que sepas que no estás sola. Muchas mujeres han pasado por la experiencia de tener un hijo. No tengas miedo de pedir ayuda a tu pareja, a tu familia y amigos, a tu médico y a otras madres que han pasado antes por lo mismo. Y, sobre todo, disfruta de este precioso tiempo con tu pequeño.
ADVERTENCIA IMPORTANTE: La leche materna es la mejor nutrición para los lactantes. La decisión de suspender la lactancia materna puede ser difícil de revertir y la incorporación de la alimentación parcial con biberón puede reducir la producción de leche materna. Cualquier error en el seguimiento de las indicaciones de preparación puede ser perjudicial para la salud del bebé. Los padres deben recibir siempre el asesoramiento de un profesional sanitario independiente sobre la alimentación de su bebé. Los productos de Mead Johnson deben utilizarse bajo supervisión médica.