A medida que te adentras en el segundo trimestre de embarazo, es posible que sufras cambios y síntomas diferentes. Descubre qué debes esperar y cómo enfrentarte a ello:
Acidez gástrica
Puedes sufrir acidez gástrica durante el segundo trimestre, ya que las hormonas del embarazo provocan que el músculo que separa el esófago del estómago se relaje, lo que causa el reflujo de los jugos gástricos, que irritan las mucosa del esófago.
Sugerencia: haz comidas ligeras y toma tentempiés. No se recomienda consumir alimentos grasos ni muy condimentados, café ni bebidas con gas. Después de comer, espera a digerir los alimentos antes de tumbarte. Además, intenta elevar la cabecera al acostarte. Bebe líquidos entre comidas, en lugar de con las comidas. Consulta al médico antes de tomar antiácidos.
Hemorroides
Las hormonas no solo ralentizan el tubo digestivo y causan estreñimiento, también pueden provocar hemorroides, las venas inflamadas y dolorosas alrededor del recto que a menudo provocan picor y sangrado.
Sugerencia: procura moverte y no permanecer sentada o de pie durante largos períodos de tiempo. Toma mucha fibra, bebe agua y haz ejercicio para mantener la eficacia del tubo digestivo. Consulta al médico antes de comenzar un programa de ejercicios.
Cambios en la piel
Ahora tu cuerpo produce más grasa, lo que te da ese "brillo" del embarazo o puede provocarte erupciones. Además, es posible que aparezcan pequeñas líneas rojas en la cara, el cuello, los brazos y el tórax, cuando el flujo sanguíneo adicional del cuerpo provoque la inflamación de los capilares sanguíneos.
Sugerencia: límpiate la cara a menudo y trata las erupciones como lo harías habitualmente.
Flujo vaginal
Puedes observar que comienzas a producir un flujo diluido y blanquecino que aumentará durante el embarazo. También puedes sufrir cierto picor.
Sugerencia: lleva ropa interior con entrepierna de algodón y lávala diariamente con agua.
Venas varicosas
Aunque este trastorno es principalmente hereditario, las venas varicosas se agravan con factores del embarazo como el aumento de peso, la disminución de la circulación sanguínea y el peso del bebé en la región pélvica.
Sugerencia: eleva los pies siempre que puedas. Cuando te sientes, cruza los tobillos en lugar de las piernas. Haz ejercicio con el permiso del médico. También puedes llevar medias de compresión.
Más información acerca del ejercicio durante el embarazo.
Polaquiuria (micción frecuente)
A medida que el tamaño de tu útero aumenta, ejerce más presión contra la vejiga y provoca una necesidad frecuente de orinar.
Sugerencia: limita la ingesta de líquidos por la noche, sobre todo las horas previas a irte a dormir.
Estreñimiento
Las hormonas del embarazo pueden ralentizar el intestino y provocar estreñimiento.
Sugerencia: bebe mucha agua y consume gran cantidad de alimentos con alto contenido de fibra. El ejercicio puede ayudarte a regular el sistema digestivo, pero consulta al médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios. No uses laxantes a menos que te los prescriba el médico.
Dolor a la palpación de la mama
Las hormonas del embarazo pueden provocar una sensibilidad extrema de las mamas.
Sugerencia: lleva un sujetador de sujeción alta, como un sujetador deportivo, incluso por la noche si es necesario.
Sugerencia saludable para tu embarazo
Acuérdate de respirar. Tu cuerpo necesita descanso durante el embarazo, aunque sean solo unos minutos al día. Has respiraciones profundas y lentas. Siéntate en una habitación tranquila. Prueba a ponerle música suave. Céntrate en las zonas en tensión. Relájate.